“Puede que estos dos cuadros no peguen mucho en esta exposición, pero he vivido mucho tiempo en Japón y no puedo evitar meter en cada uno de mis trabajos un toque asiático"
Así,
escuchando esto en la sala contigua, descubrí que aquella mujer de treinta y
tantos que hablaba con acento inglés no era una guía del museo, sino la
mismísima comisaria de la exposición Vogue Like a Painting.